La estética de la convicción Alexis Amador Huggings

Política

alt¿Cuál es la estética de Alexis Amador Huggins? A parte de ser un hombre negro, joven y pobre, ¿tiene alguna estética? Me refiero a la estética en torno a como la vida se describe a través de él. Hace unos días hablaba de la estética de Stefano Steenbakkers Betancourt, el niño adulto de 17 años, asesinado por Alexis Amador Huggins y John Anthony Morales. Ambos fueron procesados en la Corte Federal para el Distrito de Puerto Rico, y salieron culpables la semana pasada. Morales se declaró culpable y cooperó en el juicio a cambio de una promesa de una sentencia limitada. Amador fue hallado culpable.

Aunque no le guste a nadie, este caso epitomiza la estética de los blancos contra los negros. Los ricos contra los pobres. Los “casos simpáticos” para la prensa dominante, vis a vis, los casos difíciles de contar y defender. Pero para ser más honesto todavía, Amador Huggins no tiene estética alguna pues nadie ha sacado el tiempo para producirla, para describirlo, más aún, para descifrar porque en la noche del 24 de junio de 2012, decidió salir a robar un carro y pidió ejecutar al joven Steenbakkers Betancourt.

Creo que plantearnos cuál es la estética de este joven de apellidos Amador Huggins (el que abraza) es plantearnos como reconstruir una historia que no es de interés dominante en Puerto Rico. En otras palabras, la lectura de clases sociales cruzada con los discrímenes raciales es la que nos lleva a posicionarnos que nos interese más continuamente las fotos hermosas de la víctima, que pensar como fue la niñez vida y obra del asesino.

En algo coincido recientemente con el juez federal José Fuster, cuando este dice que los casos de pena de muerte que se han llevado a la federal no merecen su respeto. En particular porque son malos casos: todos los acusados han tenido un pasado disfuncional. Entonces, conocer ese pasado sería recrear una estética que nos permita ver a estos agresores como seres humanos que merecen algún tipo de tratamiento o cuidado particular – para muchos antes de haber cometido el crimen; para otros, como fue el pedido del asesino confeso de Stefano (el que haló el gatillo) de nombre John Anthony Morales.

Si me preguntaran cuál es la estética que me interesa conocer en el caso de Alexis Amador Huggins, yo preguntaría, ¿cómo fue su niñez? ¿Cómo se encontraba ese día del asesinato, había peleado con su esposa ese día? ¿Quién es su esposa? ¿Su hija? ¿Cómo le iba de técnico de refrigeración? ¿Dónde estudio? ¿Qué piensa del racismo? ¿Qué piensa de la pobreza? ¿Alguien le dijo alguna vez que era un hombre digno, hermoso y buen ser humano?

Pero la pregunta que más me interesa hacer, es a la madre: ¿Por qué usted prefirió entregar a su hijo antes de no entregarlo?