Aunque no lo crean, ya vamos para un mes en el Municipio de San Juan, donde la bandera de Puerto Rico ondea sola en varias de sus facilidades. Esto en claro desafío a la Ley de las Banderas oficiales de Puerto Rico, que proclama la presencia conjunta de la bandera de Puerto Rico y de los EE.UU en todo edificio público.
Pero más que un desafío, el pronunciamiento en torno a las banderas denota que los tiempos han cambiado en Puerto Rico, y que plantearnos más soberanía es el grito unitario hoy de todos los puertorriqueños, independientemente de su ideología política.
Ante este cuadro de clara presencia soberanista, en el día de ayer sesionó el Comité de Descolonización de la Organización de las Naciones Unidas. Es importante destacar que todas las tendencias políticas, tanto las soberanistas como las independentistas, así como el presidente del único partido pro estatidad presente en Puerto Rico, el Partido Nuevo Progresista, se dieron cita en Nueva York. Esto ocurrió en paralelo a que una delegación de 14 miembros del partido incumbente en Puerto Rico, el Partido Popular Democrático, se dieran cita también en Nueva York. Todos reclamaban mayor soberanía para Puerto Rico, desde distintos ángulos y formas, pero todos reclamaban dicho derecho.
En resolución presentada por Cuba, Nicaragua, Ecuador, Bolivia y Venezuela, fue aprobado un magno documento que expresa el derecho del pueblo puertorriqueño a la autodeterminación e independencia. Más aún, se reconoce el derecho del pueblo de Puerto Rico a recibir una transferencia de poderes de Washington a los isleños, para que seamos nosotros los que determinemos que hacer con nuestro futuro. A su vez la declaración exigió el fin al encarcelamiento del preso político de mayor tiempo encarcelado en el continente, Oscar López, y también al preso político Norberto Gonzales Claudio.
Fue un día importante para aquellos que desean que la bandera de Puerto Rico sea izada y ondeada en su soledad. Para aquellos que aspiran a otra relación más cercana con Washington, el día de ayer fue, por decir lo mínimo, confuso.