Santo Domingo-La cantidad de extranjeros en el Registro Civil de República Dominicana asciende a 53 mil 843, informó hoy el presidente de la Junta Central Electoral (JCE), Roberto Rosario.
De ese total, 13 mil 672 son hijos de haitianos, puntualizó el funcionario en rueda de prensa tras el fin de una investigación al respecto realizada en todo el país.
Explicó, además, que 29 mil 455 de los inscritos realizaron el proceso conforme a la normativa vigente pues sus padres tenían la categoría de residentes y sus respectivas cédulas de identidad.
Así, el 55 por ciento de los identificados es dominicano, afirmó Rosario, quien manifestó que las inscripciones restantes se hicieron con otros documentos o sin ellos.
Tales estadísticas derrumban muchos mitos e informaciones que no se correspondían con la verdad, agregó.
Hace 15 días, el Consejo Nacional de Migración dio esta tarea a la JCE a partir de una sentencia del Tribunal Constitucional que niega la nacionalidad a los hijos de inmigrantes indocumentados y en tránsito.
Ese fallo, rechazado por diversos sectores y con el apoyo de otros, posee un carácter retroactivo a 1929 y el mayor impacto en descendientes de haitianos.
A los hijos nacidos en el país de padres extranjeros en tránsito no les corresponde la nacionalidad dominicana, señaló el dictamen que amplía el margen de aplicación de las leyes existentes.
Tampoco podrán solicitar el status de residente permanente aquellos nacidos cuyos progenitores sean extranjeros indocumentados que viven en Dominicana.
El Tribunal tomó la mencionada determinación ante la solicitud de amparo de una hija de inmigrantes haitianos nacida en la provincia de Monte Plata para demandar a la JCE que le proporcionara documentación como dominicana.
La afectada ha vivido en dicho territorio sus 29 años de edad y tiene cuatro hijos, quienes tampoco podrán optar por su nacionalización.
Si bien nació en suelo nacional, la recurrente es hija de ciudadanos extranjeros en tránsito, lo cual la priva del derecho al otorgamiento de la nacionalidad dominicana, dictaminó el Tribunal.
Al mismo tiempo, ordenó a la JCE auditar los libros de nacimientos del Registro Civil desde el 21 de junio de 1929 con el fin de ajustarlos a los criterios establecidos en el fallo.