Y las bicicletas… ¿qué?

Justicia Social

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Lo mejor del fin de semana ha sido que ningún ciclista fue atropellado en Puerto Rico. Esto es una buena noticia, toda vez que en los pasados fines de semana llevábamos una racha de por lo menos un ciclista fatalmente atropellados, y en otras dos ocasiones, ciclistas heridos por conductores.

No obstante, este fin de semana no murió ningún ciclista. Dicho esto, sí se reportó la muerte de un motociclista en el municipio de Añasco, quien conducía a exceso de velocidad, invadió el carril contrario y  murió camino al hospital.

Pero, para los ciclistas, miles de ellos y ellas, éste fue un buen fin de semana. No hubo accidentes ni nada que lamentar. Ahora bien, y luego de haberse aprobado la primera legislación efectiva para regular los banchis y/o cuatri-motos, ¿qué vamos a hacer con las bicicletas?  Algo me dice que la no regulación adecuada no es la forma correcta para supervisar un pasatiempo y deporte, que ha logrado capturar la atención de miles de personas que hoy practican este pasatiempo y deporte.

Es curioso, pues las bicicletas parten de la premisa que son “propulsadas” como los vehículos de motor, y por tanto tienen la misma capacidad para transitar en las vías de rodaje.  Esto no es correcto, y es lo que nos expone a muchos conductores a cometer errores.  Dicho lo anterior, y de igual forma, las bicicletadas diurnas, competitivas o de entretenimiento, tienen un efecto complejo en la población.  Pero las bicicletadas nocturnas son mucho más complejas.  Toda vez que las mismas incumplen con las más mínimas reglas de tránsito y peor aún, se da en un contexto de poca visibilidad.

En fin, que debemos comenzar un debate en torno a las bicicletas en las vías de rodaje.  El debate no debe ser de inclusión o exclusión.  Por el contrario debe ser de compartir responsabilidades en un diverso mundo donde tanto los unos como los otros, que utilizan vehículos de motor o bicicletas, deberían tener derechos similares para transitar en la vía pública.