Kingston- La policía de Jamaica expresó ayer su preocupación por el aumento de la criminalidad en la parroquia de San James, tras contabilizar 12 asesinatos en solo una semana.
De acuerdo con un reporte policial divulgado, los crímenes en esta parroquia suburbana, situada en el extremo noroeste de esta isla, están relacionados con las guerras entre pandillas.
Investigaciones de los agentes del orden aseguran que entre los incidentes ocurridos a lo largo de esta semana, figuran un triple homicidio y dos asesinatos dobles.
El alto mando de las fuerzas del orden indicó que estos hechos ocurren en su mayoría por disputas de pandillas o conflictos familiares, y lamentablemente alcanzan a niños, ancianos y mujeres, que se convierten en muchas ocasiones en el objetivo de esas venganzas.
"Van a matar a personas inocentes que ellos saben o creen que son parientes o socios de sus objetivos", indica un comunicado de la Red de Comunicación Policial (CCN).
Ante esa situación, las autoridades crearon un servicio de llamadas confidenciales para que los residentes que sospechan que sus familiares o asociados participan en pandillas o grupos criminales, informen y alerten a los agentes del orden.
El pasado 5 de diciembre, el ministro de Seguridad, Peter Bunting, puso en marcha el programa de sensibilización pública "Unidos por el Cambio", dirigido a frenar la creciente violencia y a reavivar la esperanza entre los jamaiquinos.
La iniciativa contempla varias estrategias, entre ellas, un programa intensivo de educación pública y de resocialización para desplazar los elementos disfuncionales de la cultura nacional.
Bunting consideró que el crimen es el resultado de fallas en diferentes niveles de la sociedad, la familia, la comunidad, la escuela, la iglesia y las estructuras de gobierno.
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