Puerto Rico hoy en la CELAC: ¿declaración unilateral de independencia?

Justicia Social

altEn 24 horas inicia la II Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) en la Habana, Cuba. Según el líder histórico de la revolución cubana, Fidel Castro, se trata del evento más importante en el hemisferio en los pasados 100 años. Para los 33 jefes de estados de la región que asistirán a este evento, sin lugar a duda, las palabras de Castro son como caramelos en la noche. Más allá de la importancia de la actividad, para los boricuas plantea un momento sin precedentes en la historia del País: por vía del gobierno de Venezuela se va a invitar a que Puerto Rico constituya el asiento 34 de dicha organización. Esto sin la anuencia del presente Gobierno de la Isla comandado por el Partido Popular Democrático y su gobernador, Alejandro García Padilla.

La idea de la silla 34 ha sido un gesto de buena voluntad del presidente venezolano, Nicolás Maduro. En los pasados días, Maduro se ha concentrado en decir que Puerto Rico debe ser incorporado en la CELAC como parte de un esfuerzo concertado por la descolonización e independencia de la Isla. Tal ha sido el empuje de sus palabras que el pasado jueves se celebró en el Teatro Nacional de Caracas un junte político titulado Por un Puerto Rico libre e independiente. A dicha actividad comparecieron líderes del Partido Independentista Puertorriqueño, entre otras formaciones políticas de la Isla.

Ahora bien, a Cuba llegó ya una elocuente y amplia delegación de independentistas y soberanistas del País. Representantes del Partido Independentista Puertorriqueño, Movimiento Unión Soberanista, Movimiento Independentista Nacional Hostosiano, Frente Socialista y el Comité Puerto Rico en la ONU, viajaron de forma concertada y organizada a participar como delegación de la Isla en este evento mayor. La pregunta es quién va a ocupar dicha silla, ¿el Gobierno ausente de Puerto Rico o un representante de la delegación de partidos independentistas presentes en la jornada?

Es una decisión difícil por varias razones. Por un lado, el presidente Maduro nos invita a un tipo de declaración de independencia por Puerto Rico. Eso lo podemos entender, sobre todo, desde la solidaridad. Pero en la ausencia del Gobierno de Puerto Rico, las organizaciones políticas independentistas y soberanistas presentes hoy en Cuba, ¿si se sientan en la silla 34, constituiría eso una declaración unilateral de independencia? La respuesta es afirmativa.

Dicho lo anterior, nos parece que lo correcto es que la delegación de boricuas en Cuba vaya seleccionando un delegado para representar los intereses de Puerto Rico ante la CELAC. Luego se tendrá que resolver los problemas que le habrá de causar tanto al Gobierno de Washington como al de San Juan, tener un delegado de un movimiento de liberación nacional como representante de la Isla. Ya veremos que hace Washington.