El gobierno de Puerto Rico, le ha presentado a la legislatura de la Isla una, en mi opinión insensata, propuesta para una emisión de bonos, por el valor de 3,500 de dólares (USD). Esta noticia se dio simultáneamente con la de que las compañías de servicios financieros estadounidenses Standard & Poor’s (S&P) y Moody’s decidieran arbitrariamente devaluar el valor de la deuda del gobierno del territorio de los Estados Unidos a chatarra.
Los bonos serán para la Corporación del fondo de interés apremiante (COFINA). COFINA, utilizará como fuente de repago para los futuros bonos, la porción estatal del Impuesto sobre las Ventas y Uso, el (IVU). Esto es una propuesta que actualmente tiene el aval de la secretaria del Departamento de Hacienda, Lcda. Melba Acosta. No obstante, en un país donde hay una notoria evasión contributiva, que está inmersa en plena Gran Recesión, y con un rampante desempleo, contar con el repago de este tipo de contribuciones, basadas en el consumo es un poco inverosímil. Pero más allá del sentido común, lo más alarmante de esta situación es que con la emisión de estos bonos se aumenta el tope de la deuda que tiene el gobierno del Estado Libre Asociado a un 15% , que actualmente no llega al 13%.
En otras palabras, que cuando la economía de la Isla parece estar en su momento más crítico, la política del gobierno es la de ir a buscar más dinero prestado. ¿Y nos preguntamos a quien beneficiará esto? No se sabe concretamente, pero siempre alguien saldrá beneficiándose. Lo que sí sabemos es que no será en ayudas para los pobres, discapacitados, jóvenes, ancianos y los miles de desempleados.
En esta coyuntura es interesante analizar la reacción de las personas del gobierno ante la degradación, o sea de los que están en el poder. Por un lado, el presidente del senado, Lcdo. Eduardo Bahatia emitió un sendo comunicado de prensa, en el que acusó a las compañías evaluadoras como traidoras al pueblo puertorriqueño. Por otra parte, el gobernador, Lcdo. Alejandro García, llamó al pueblo, con campañas publicitarias, que llamaban al pueblo a que se levantara ante la crisis; tweets por parte del Gobierno como #reconstruyendopr y #PRvencera han estado inundando las redes sociales. Un llamado apropiado, para que se levante el pueblo de su letargo económico y de un “day dreaming” existencial; pero dudo que sea en el mismo sentido que yo lo entiendo, y más bien en una de ir acumulando votos para las elecciones 2018.
La realidad que hemos observado, durante en las últimas dos semanas, es que los sectores de la sociedad civil, los universitarios y los sindicatos; o desconocen a profundidad de temas económicos o vivimos en un país (territorio) donde reina la desidia y/o el desinterés por estos temas. Cabe mencionar, la excepción del Colegio de Contadores Públicos Autorizados, que entendiendo la seriedad de la crisis pusieron todos sus recursos en manos del Gobierno.
En ese sentido, la falta generalizada de representación del pueblo en estos procesos es preocupante. ¿Dónde están los líderes de los trabajadores y aquellos tantos teóricos del marxismo, con los cuales platicábamos tanto sobre economía y el proletariado en la universidad?
En momentos, donde el neoliberalismo se avecina como la más ideología sensata, en la lógica de los capitalistas de la Isla, y ante la inexistencia de un movimiento político y social de tipo marxista; recomendó ver como ejemplo el modelo del Partido dos Trabalhadores de Brasil, que junto al pueblo lograron transformarse del neoliberalismo hacia una democracia más justa y representativa, en el ámbito de una potencia económica emergente.