La Habana- Ramón Silverio, el promotor cultural que erigió una catedral de la inclusión sobre las ruinas de un hotel, cree más en las pequeñas obras cotidianas que en consignas y críticas.
Tal espíritu rige al Mejunje, el centro cultural comunitario que creó hace 30 años en la central ciudad de Santa Clara, y espera que también prevalezca en el próximo congreso de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac).
Entrevistado por la televisión nacional a propósito de la cercana cita, Silverio consideró "definitorio" este congreso y espera que se caracterice por una confrontación sana de pensamientos.
"Dialogar también es escuchar al otro, y este congreso tiene que ir al diálogo", advirtió el director del legendario Mejunje, donde se dice que todo está permitido, menos cortarse las venas.
En conversación previa con Prensa Latina, Silverio profundizó en algunas de las ideas que apenas logró colar entre las anécdotas y disquisiciones del entrevistador, como su confianza en la juventud.
"El Mejunje es como la vida misma -explicaba entonces- nunca me propuse hacerlo así: fue el aceptar lo que atrajo a los diversos grupos sociales, con la premisa de no excluir a nadie".
El Local, como también lo conocen sus asiduos, goza de prestigio popular y gubernamental, amén de ser cuartel general de trovadores, rockeros, frikis, soneros, bohemios, danzoneros e intelectuales.
Ahora vienen los hijos y nietos de los primeros parroquianos del Mejunje, que debe su nombre a la infusión que repartía Silverio en las tertulias fundacionales, a un costado del Teatro La Caridad.
Así nació este proyecto reconocido incluso fuera de Cuba por su carácter inclusivo, donde nadie es marginado, todos se respetan y poco a poco se han roto barreras, tabúes y prejuicios.
Sus muros tapizados de grafitis albergaron los primeros shows de transformistas en Santa Clara, hace años, cuando la lucha contra la homofobia no tenía la magnitud y repercusión social de ahora.
"Yo creo en los jóvenes, hay que confiar en ellos, en el Mejunje lo hacemos, y cuando les creamos espacios que sean contrapartida al mal gusto, estamos educándolos y salvando nuestra cultura", señaló.
La Uneac celebrará su octavo congreso nacional los próximos 11 y 12 de abril, con un llamado a la vanguardia artística a contribuir a la educación ciudadana y a combatir la banalidad y la pseudocultura.
ro/cmv