Dedico este poema a Vicente Rodríguez Nietzsche
Sobre una isla sentencia
una quimera
en un oscuro cielo azul
(lente del norte impuesto
en la gran alacena).Dedico este poema a Vicente Rodríguez Nietzsche
Sobre una isla sentencia
una quimera
en un oscuro cielo azul
(lente del norte impuesto
en la gran alacena).Me mira, me reconoce, me culpa y cierra sus labios;
no quiere comer conmigo.4645 han muerto y nada.
Muertos de hambre con el olor a comida al lado
muertos de frío con la cobija abrigada por plástico
muertos de sed con agua cristalina en raciones de 16.9 oz.amanece
tras una década de silencios y cenizas
verso a verso se descorcha el puente“…la que se alza en mi voz no es tu voz…”
-Julia de BurgosHasta ayer me vestí de margaritas
para reír contigo.
En pétalos del sí, abría mi corola
como letrero de opening night.